La ciudad de Barcelona ha logrado convertirse en una de las urbes más turísticas de Europa. Según la oficina de turismo de Barcelona, en 2018 la cifra total de turistas fue de unos 15 millones. La ubicación del recinto portuario es idónea para que los cruceristas lleguen más rápidamente al centro histórico y para que puedan disfrutar al máximo de los múltiples encantos y atractivos de esta gran ciudad.
Creuers del Port de Barcelona S. A. se fundó en 1999 y desarrolla su actividad empresarial en las terminales A, B, C, muelle Adossat, Terminal Norte y Terminal Sur del World Trade Center. A lo largo de su existencia ha conseguido convertir este puerto en el cuarto más grande del mundo.
Uno de los grandes objetivos de estos gestores era la renovación de las terminales para que los cruceros de mayor tamaño pudieran hacer escala en este puerto. Estos navíos de la clase Oasis (MS Allure of the Seas y MS Harmony of the Seas) tienen ahora parada fija en este recinto año tras año.
La conexión, a través del vestíbulo, de las terminales B y C así como una pasarela específica para los cruceros antedichos han sido reformas muy bien recibidas tanto por los viajeros como por los profesionales del sector. Además, se hace un continuo esfuerzo por ponerse siempre en el papel del usuario para lograr la excelencia.
Gracias a esta filosofía, se ha conseguido contratar al personal más adecuado, a incrementar las medidas de seguridad en las terminales y en todos los procesos que se llevan a cabo en ellas, así como a colaborar con las fuerzas de seguridad del Estado para que el puerto sea un espacio mucho más seguro.